A partir del 19 de agosto, se implementará un sistema automatizado que sancionará a conductores que estacionen en doble fila o bloqueen paradas de autobús, mejorando el tráfico y la seguridad vial.

Ahora, los conductores de Nueva York deberán estar más atentos a las reglas de tránsito, ya que la Autoridad de Transporte Metropolitano (MTA) comenzará a emitir multas automáticamente a aquellos que bloqueen paradas de autobús o se estacionen en doble fila cerca de ellas. Esta medida forma parte de la expansión de un programa piloto que busca mejorar el flujo del tráfico y garantizar la seguridad de los usuarios del transporte público.

El nuevo sistema, conocido como Automated Camera Enforcement (ACE), utilizará cámaras instaladas en los autobuses para capturar imágenes de los infractores. La información recolectada, que incluye el número de matrícula del vehículo, la ubicación y la hora de la infracción, será enviada al Departamento de Transporte de la Ciudad de Nueva York para su revisión y posterior emisión de multas. Este programa es una extensión del sistema ABLE (Control Automatizado de Uso de Carriles Bus), el cual operaba en 600 autobuses y multaba únicamente a los conductores que bloqueaban carriles exclusivos para autobuses.

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La implementación del programa ACE no solo busca sancionar a quienes obstaculicen el paso de los autobuses, sino también mejorar la velocidad de circulación en las rutas afectadas. Según datos de la MTA, la activación de las cámaras en los autobuses ha demostrado ser altamente efectiva. La velocidad de los autobuses en los carriles exclusivos aumentó un 5 %, mientras que el número de colisiones se redujo en un 20 %. Además, se estima que la medida ha contribuido a la reducción de emisiones contaminantes entre un 5 % y un 10 %.

El director de accesibilidad de la MTA, Quemuel Arroyo, expresó su satisfacción con la ampliación del programa. “Mantener las paradas de autobús despejadas es fundamental para garantizar que todos nuestros clientes puedan subir y bajar del autobús de forma segura», señaló Arroyo, quien también destacó lo frustrante que es para los pasajeros, especialmente para aquellos con movilidad reducida, enfrentarse a vehículos que bloquean las paradas. “Estoy encantado de activar ACE hoy y espero que haya paradas de autobús más despejadas y viajes más rápidos», concluyó.

Proceso de multas y advertencias

Los conductores que infrinjan las nuevas reglas recibirán primero una advertencia durante los primeros 60 días de implementación del sistema. Pasado este período, las multas comenzarán a emitirse de forma progresiva, con sanciones que van desde los $50 por la primera infracción hasta $250 por infracciones recurrentes dentro de un período de 12 meses. Las sanciones establecidas son las siguientes:

• Primera infracción: $50
• Segunda infracción: $100
• Tercera infracción: $150
• Cuarta infracción: $200
• Cada infracción subsiguiente: $250

Las multas llegarán a los infractores en un plazo de 30 días tras la emisión de la infracción, bajo un Aviso de Responsabilidad (NOL), que incluirá todos los detalles de la misma.

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La implementación del programa ACE no solo busca sancionar a quienes obstaculicen el paso de los autobuses, sino también mejorar la velocidad de circulación en las rutas afectadas. Según datos de la MTA, la activación de las cámaras en los autobuses ha demostrado ser altamente efectiva. La velocidad de los autobuses en los carriles exclusivos aumentó un 5 %, mientras que el número de colisiones se redujo en un 20 %. Además, se estima que la medida ha contribuido a la reducción de emisiones contaminantes entre un 5 % y un 10 %.

Uno de los puntos clave del programa es la baja tasa de reincidencia. Según la MTA, solo el 9 % de los conductores que reciben una multa vuelven a cometer la misma infracción. Esto refuerza la efectividad del sistema como una herramienta no solo para sancionar, sino para disuadir conductas indebidas en el tráfico.

Rutas con cobertura del sistema ACE

El programa ACE, que inicialmente se probó en un número limitado de rutas, se expandirá gradualmente para abarcar más áreas de la ciudad de Nueva York. Entre las rutas que ya cuentan con cámaras instaladas se encuentran las siguientes: B44 SBS, B46 SBS, Bx12 SBS, Bx19, B62, Bx41 SBS, Bx36, M14 SBS, M15 SBS, M23 SBS, M34 SBS, Q44 SBS, Q54 y Q58.

La expansión no se detiene aquí. Hacia finales de este año, la MTA prevé instalar cámaras en más de 1.000 autobuses, cubriendo un total de 33 rutas adicionales en Brooklyn, Queens, Manhattan y el Bronx. Con este incremento, se espera que más conductores modifiquen sus hábitos al volante y contribuyan a una mejora significativa en la movilidad de los autobuses en toda la ciudad.

El programa ACE forma parte de una estrategia para mejorar el transporte público en Nueva York. Además de reducir las demoras ocasionadas por vehículos mal estacionados, la MTA espera que el sistema automatizado ayude a descongestionar áreas críticas y a brindar un servicio más eficiente a los usuarios del transporte colectivo. Al respecto, la MTA ha emitido más de 438.000 avisos de infracciones desde que inició el uso de cámaras en 2019, lo que evidencia la importancia de estas medidas para la optimización del tráfico en la ciudad.

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Los ciudadanos pueden obtener más información sobre las rutas afectadas y las sanciones previstas visitando el sitio web de la MTA o comunicándose directamente con el Departamento de Transporte.

Por: Analy Velasco, periodista.