El icónico abeto de 2024, con 22 metros de altura y 11 toneladas, parte hoy de Massachusetts hacia el Rockefeller Center, donde se convertirá en el símbolo central de las festividades en Nueva York.

Este 7 de noviembre, el famoso árbol de Navidad del Rockefeller Center inicia su viaje desde West Stockbridge, Massachusetts. Este imponente abeto de Noruega, con 22 metros de altura y un peso de 11 toneladas, representa una tradición navideña fundamental para la ciudad de Nueva York. Tras un viaje de aproximadamente 225 kilómetros, el árbol llegará a Manhattan el 9 de noviembre. De hecho, esta es la primera vez en 65 años que el árbol proviene de Massachusetts, lo que añade un toque especial a esta temporada navideña.

Para el traslado, los organizadores han planificado cada detalle minuciosamente. Hoy, el equipo comenzará el proceso con la tala del árbol, que será cuidadosamente cargado en un camión especial diseñado para soportar su enorme peso y tamaño. En su ruta hacia Nueva York, el árbol pasará por diversas ciudades, atrayendo la atención de todos los espectadores a su paso. Finalmente, el 9 de noviembre, llegará al Rockefeller Plaza, donde será izado en su emblemático lugar.

Decoración y preparativos: la transformación del árbol en ícono navideño

Una vez instalado en el Rockefeller Center, comienza la compleja labor de decoración. Este año, el abeto brillará con 50.000 luces LED multicolores, un despliegue que requiere cerca de ocho kilómetros de cable. Además, en la punta del árbol se colocará una brillante estrella de Swarovski diseñada por el arquitecto Daniel Libeskind. Esta pieza, de 450 kilogramos y adornada con tres millones de cristales, se introdujo en 2018 y ha sido una de las características más deslumbrantes del árbol desde entonces.

Este proceso de decoración no solo implica precisión, sino también dedicación y un gran equipo de trabajo que asegura que cada luz, cada adorno, y cada detalle esté perfectamente ubicado para ofrecer una vista deslumbrante. Cada año, el equipo enfrenta nuevos desafíos, pero su objetivo final es siempre el mismo: crear una atmósfera mágica para todos.

Eventos especiales en el encendido del árbol

El 4 de diciembre, se llevará a cabo la tan esperada ceremonia de encendido del árbol, que marcará oficialmente el inicio de la temporada navideña en Nueva York. Como en ediciones anteriores, esta ceremonia se transmitirá en vivo a través de las redes sociales del Rockefeller Center, permitiendo a personas de todo el mundo disfrutar del espectáculo.

Además, este año, los visitantes que asistan al evento en el South Plaza tendrán actividades adicionales. Entre estas, destaca la actuación de Rock and Roll Playhouse, que interpretará clásicos navideños especialmente adaptados para niños. También, en colaboración con la librería independiente McNally Jackson, se realizarán lecturas de cuentos navideños, así como talleres de manualidades donde los niños podrán crear adornos y escribir cartas a Santa Claus.

Estos eventos están diseñados para que toda la familia disfrute y vivan juntos la emoción de la temporada. Todo es gratuito, y se espera que miles de familias asistan para sumarse a esta tradición, que cada año se convierte en una experiencia inolvidable para todos.

Un legado que continúa: el árbol será donado a Habitat for Humanity

Tras la temporada navideña, el árbol tendrá una segunda vida. Desde 2007, el Rockefeller Center dona el árbol a Habitat for Humanity, una organización sin fines de lucro que utiliza su madera para construir viviendas accesibles. Así, el abeto de Noruega no solo ilumina Nueva York durante la Navidad, sino que también contribuye a una causa noble al finalizar las festividades.

Por: Analy Velasco, periodista.