La administración federal otorga una prórroga de 30 días a Nueva York para ajustar su sistema de tarifas en Manhattan, mientras continúan las conversaciones sobre su impacto y viabilidad legal.
El gobierno de Donald Trump ha decidido conceder un mes adicional para que Nueva York haga modificaciones a su esquema de cobro a vehículos que ingresan a Manhattan. Este programa impone una tarifa de $9 a los automóviles que cruzan hacia el sur de la calle 60 con el propósito de disminuir la congestión vehicular y generar ingresos para mejorar el transporte público.
La decisión de extender el plazo responde a desacuerdos entre la administración federal y el estado de Nueva York sobre la legalidad y efectos del sistema de pesos.
Origen del cobro por congestión en Nueva York
La tarifa por congestión se implementó en enero con la intención de reducir el tráfico en el centro de la ciudad y conseguir fondos adicionales para la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA).
Desde su entrada en vigor, se ha reportado una disminución en la circulación vehicular y una mejora en la movilidad de autobuses y vehículos de emergencia. Además, se proyectaba que este sistema generaría miles de millones de dólares en inversiones para la infraestructura del transporte.
Declaraciones del secretario de Transporte, Sean Duffy
.@GovKathyHochul — the federal government and @POTUS are putting New York on notice.
Your refusal to end cordon pricing and your open disrespect towards the federal government is unacceptable.
Just as your high tolls and no free road option are a slap in the face to hard…
— Secretary Sean Duffy (@SecDuffy) March 20, 2025
El secretario de Transporte, Sean Duffy, criticó en redes sociales la postura de Nueva York en relación con el cobro por congestión. En una publicación reciente, manifestó: “Su negativa a eliminar este sistema de tarifas y su falta de cooperación con el gobierno federal no serán toleradas”.
Además, advirtió sobre posibles repercusiones económicas para el estado si no se ajusta la medida: «Los recursos que el gobierno federal proporciona a Nueva York no son ilimitados. La falta de cumplimiento tendrá consecuencias».
Respuesta de la gobernadora Hochul
Kathy Hochul, gobernadora del estado, ha defendido el sistema de cobro argumentando que es clave para financiar mejoras en el transporte público. Pese a la presión del gobierno federal, ha reiterado que la medida seguirá vigente mientras se analizan sus efectos y se resuelven los conflictos legales.
Perspectivas futuras y consecuencias legales
La extensión de 30 días permitirá que ambas partes continúen con las negociaciones y busquen una solución que contemple tanto las preocupaciones del gobierno federal como los intereses del estado. La MTA ha indicado que tomará medidas legales para asegurar la continuidad del programa, argumentando que eliminarlo afectaría el financiamiento de proyectos esenciales.
El debate sobre el cobro por congestión en Nueva York sigue abierto y enfrenta posturas encontradas entre el gobierno estatal y la administración federal. El futuro del programa dependerá de las decisiones que se tomen en las próximas semanas y del impacto que estas puedan tener en la movilidad y la economía de la ciudad.
Por Analy Velasco, periodista.
