El Departamento de Transporte de EEUU y Amtrak asumirán la gestión del proyecto, dejando fuera a la MTA como autoridad principal.
El Gobierno Federal ha informado que tomará el mando del rediseño de Penn Station, uno de los nodos ferroviarios más transitados de Nueva York. Según lo indicado por el Departamento de Transporte de los Estados Unidos (USDOT), la decisión establece una colaboración directa con Amtrak, propietaria del inmueble, para encabezar los trabajos de mejora de la estación, reemplazando el papel principal que hasta ahora ocupaba la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA).
Nuevo enfoque federal para la estación
En el anuncio oficial, el secretario de Transporte, Sean P. Duffy, explicó que «no hay razón para que una tercera organización lidere un proyecto de esta magnitud, cuando el Gobierno Federal y Amtrak pueden llevarlo a cabo directamente». Para Duffy, esta fórmula permitirá avanzar sin depender de propuestas anteriores asociadas a desarrollos inmobiliarios en la zona.
Además, el funcionario agregó que el cambio de dirección podría representar una economía estimada de 120 millones de dólares respecto a estudios previos, eliminando «cargas innecesarias para los contribuyentes». También se mencionó que el proyecto se centrará en las condiciones actuales de la estación y no afectará los niveles subterráneos operativos.
Posición de la MTA tras la notificación oficial
Janno Lieber, presidente y director ejecutivo de la MTA, expresó en una declaración pública que, si bien Amtrak es propietaria de la infraestructura, “la mayoría de quienes entran y salen de Penn Station lo hacen mediante servicios que gestiona la MTA”. Además, sostuvo que su agencia ya ha implementado mejoras relevantes, como el nuevo corredor de la calle 33.
Lieber aseguró que espera que la MTA continúe teniendo un rol en las etapas futuras del proyecto. “Es esencial que los intereses de los millones de neoyorquinos que dependen de este punto de conexión todos los días estén representados”, afirmó.
Cambios en la planificación y próximos pasos
La decisión marca un giro respecto al modelo anterior impulsado por autoridades estatales, que contemplaba desarrollos de gran escala alrededor de la estación. El nuevo esquema propone concentrarse exclusivamente en mejoras funcionales de la estructura existente, según confirmó el USDOT.
Aunque aún no se ha definido un cronograma de obras, las autoridades federales anunciaron que se abrirá una nueva fase de planificación. Amtrak participará activamente en este proceso como operador y propietario del inmueble, mientras que el gobierno se encargará de coordinar las políticas de infraestructura que afecten al transporte intermodal en la zona.
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Por Analy Velasco, periodista.
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